Habemus kart!! (II)

Se acabaron las vacaciones. Mañana lunes vuelta a la rutina y al trabajo. Pero al menos, despedimos estas semanas de asueto estrenando el nuevo kart! Si, habemus kart! Otro kart (segunda mano,of course). Esa era la noticia que tenía previsto haberos comunicado hace algunas semanas.

Un kart para tres se nos estaba quedando corto. En los inicios era más que suficiente, pero ahora ya vamos pillando fondo físico, y vamos aprendiendo sobre su mecánica, así que era el momento de dar un paso adelante. Ahora todo se complica un poco más; hay que trasladar dos karts al circuito, hay que afrontar averías y problemas por duplicado. Tenemos que reorganizarnos entre nosotros para las típicas tareas de limpieza, cuidado y mantenimiento... pero, también vamos a avanzar un montón en el aprendizaje. Rodar con dos karts será más divertido. Nos picaremos sanamente entre nosotros. Aprenderemos a rodar en compañía, a rodar delante de alguien que va pegadito, a rodar detrás de alguien a quién vas pegadito :) Se trata de avanzar y aprender. Poco a poco, pero siempre hacia adelante.

El nuevo kart (nº 19) junto con su compañero.

Hubo algun pequeño gran debate cuando surgió la idea de adquirir otro kart. Indudablemente apareció la tentación de adquirir uno de marchas. Pero claro, con uno de marchas la competitividad entre nosotros mismos quedaba anulada. Era mejor pensar en un kart similar. Otro automático. Con el Rotax llevabamos mucho camino avanzado. Un motor que conocemos, del que hemos aprendido mucho, que sabemos que cosillas pueden fallar, que tenemos su carburación controlada... la elección más lógica era buscar otro Rotax. Así también podríamos compartir piezas y recambios. ¿Y el chasis? Con CRG estabamos muy contentos, pero tampoco nos cerrabamos a otras posibilidades.

Pero, apareció una ocasión en León por medio de Karter & Wings, y nos convenció. Un CRG-Rotax casi clon del nuestro. Chasis del mismo año (aunque con una evolución mas moderna) , motor Rotax también del mismo año pero con filtro de aire antiguo (que algunos dicen que va mejor).... y bueno, nos decidimos. Viajó semidesmontado y metido en una caja, paletizado y enviado por agencia de transporte. Y llegó. Con algo de retraso, pero llegó. :)



Así que ayer sábado al circuito que nos fuimos.
Primera impresión: el nuevo va como un tiro!!! Va mejor que el otro. (El otro... el primero... ¿cómo llamarle ahora? Me niego a llamarle el viejo, le tengo demasiado cariño) . Claro, a nuestro primer kart le hemos hecho más de 40 horas de pleno e intensivo uso. Pronto le toca la revisión. Creemos que el embrague no está al 100%... es normal que no tenga las mismas facultades que el nuevo, que está recién revisadito.

A mitad de la jornada, el nuevo nos dá un susto. Deja de subir de revoluciones. Llega a 7500, y no sube más. Caras de preocupación. Se supone que está recién revisado y no debería de dar ningún problema. Bueno, tranquilidad, vamos a ir revisando poco a poco a ver si sacamos algo en claro. ¿Válvula? Desmontamos. Está bien. ¿Bujía? La sacamos. Parece estar correcta. La cambiamos por una nueva, por si acaso. Probamos. Sigue fallando. ¿que demonios ocurre?
Bueno, vamos a desmontar el carburador. Así de paso vemos las boyas que lleva. En la cubeta inferior se observa suciedad. Limpiamos los tres chiclés, el principal, el de altas, el de bajas. Volvemos a montar. Pruebo en la explanada del paddock. Subo al circuito. Ahora si sube. ¡Vuelve a ir bien! Parece que la porquería nos ha dado el sustillo del día.



Las tandas se van sucediendo. Que divertido es esto de rodar juntos. Ahora voy delante, corrígeme si me ves algo mal. Te veo asomar por el rabillo del ojo cuando me quieres meter el morro. Giro la cabeza un nanosegundo para saber donde estás. Pásame, que quiero ir detrás. Veo que trazas diferente en una curva. Sacrificas en la frenada para salir más deprisa. Yo suelo entrar mas rápido y salir más despacio. Te copio. Hmmm, no está mal el cambio. Pasan las vueltas. Vuelvo a pasar delante. Ahora sube la competitividad. Cierro huecos. Trazo más defensivamente. Me atacas más. Vas pegado. Cometo un ligero error y me pasas. Grrr, no es rabia, no es cabreo, pero de dentro me surje un nuevo sentimiento que me hace tirar y arriesgar más en cada frenada y en cada curva. Te estudio. Veo el hueco. Y me tiro. A por todas. Y te paso. Que adrenalina!! Volvemos al paddock. Buen rollo. Siempre buen rollo. Es algo que siempre hemos de tener en cuenta. Esto lo hacemos para divertirnos, eso nunca hay que olvidarlo. :)

Las dos máquinas en acción! :)